La primera vez que pase por su puerta iba buscando un regalo para alguien a quien admiro y con un gusto totalmente diferente al mío. Aquella puerta antigua esa cristalera con esas joyas minimalistas me dieron la pista que quizás allí encontraría mi regalo perfecto. Aquel detalle geométrico que necesitaba hecho joya.
Categoría: El Mundo por Peineta
Una joya en Gracia
Seguimos por mi ruta particular por el barrio de Gracia, hoy le toca a las joyas, o al menos a parte de ellas. Porque un dulce no le amarga a nadie. Personalmente ni puedo ni voy a ir a Cartier o Suarez, pero hace años que conozco pequeños sitios donde hacen un buen trabajo artesano con gusto, calidad y precio razonable. ¿Me acompañáis?
Shopping en el barrio de Gracia
En el barrio de Gracia a parte de tiendas exclusivas, vintage y de diseño, hay muchas opciones de comprar de una manera relativamente económica y poder hacerte con cosas ponibles que no sean muy caras. O sencillamente hacer algún regalo a alguien. Hoy el post va en modo práctico y sencillo pal bolsillo
Conexiones Saludables
Hace unas semanas tuve unos días llenos de eventos especiales, donde descubrí sitios increíbles de Barcelona y gente nueva del 2.0. Todo empezó en un café con croissant único que montó Born Magazine, donde conocí a caras nuevas con horizontes diferentes. Así que gracias EVE por un networking único.
In love with GRACIA
Más de una vez os he hablado del cambio que supuso para mí la maternidad en muchos aspectos y como hace poco os confesé incluso en mi visión sobre Barcelona. Hace unos días volví a hacer de cicerone para un familiar por uno de mis barrios predilectos de la ciudad. El caso es que ahora con tanta RRSS cada vez que subo algo de allí me preguntáis, así que me voy a lanzar a daros mi pequeña guía de unos de mis rincones preferidos de Barcelona, por capítulos, con amor, cariño y muy a mi manera. Quiero invitaros a descubrir mis rincones favoritos del Barrio de Gracia.
Barcelona Kidfriendly
Una de las cosas que cambió para mí cuando fui madre, fue mi perspectiva de la ciudad donde vivía. Pase de adorar Barcelona a añorarla, a echar de menos sus teatros, sus restaurantes multicultares, sus rutas de tiendas de diseño alternativas, sus mil y un espectáculos. Si soy sincera me puse tal venda en los ojos que a poco más y mudarme a un pueblo me parecía un lujo sin fin. Aquella ciudad ya no era lo que había sido para mí.
Un bricoamor imposible
Todo el mundo hablaba de él, todo el mundo lo había probado, todo el mundo lo quería y claro, yo no iba a ser menos y caí rendida a sus pies a la primera de cambio. Grosso error de mi parte, porque nunca pensé que después de la primera vez me tocaría serle infiel porque lo nuestro no podía ser….Chalk o chalky para los amigos había pasado por mi vida fugazmente para adentrarme en el mundo oscuro del DIY y luego dejarme compuesta y sin novio.
¡Vámonos de Feria!
Saquen el vestido de faralaes, desempolven el sombrero de ala ancha y a por ese rebujito señores!!! Pues no os vengáis arriba con las palmas que no me refiero yo a esa feria, y ojo no será por ganas no. Hoy voy a hablaros de mi aventura novata en una feria de exposición y de cómo llegué al hotel cual cadáver descuartizado y analicé ese maratoniano día muy peineteramente hablando. Va por adelantado mi admiración a todas las compañeras que hacen la peregrinación anual a San Puericultura Madrid de todos los santos y a todas esas marcas que aguantas estoicos y lo dan todos esos 4 días, año tras año, ya le gustaría al Roció tener esa entrega.
De vela a vela y tiro por que me toca
Dicen que mañana es mi cumpleaños, dicen que lo llevo estupendamente y dicen que empiezo a rozarlos cuarenta. En fin dimes y diretes, la realidad es que es un miércoles, un día que no me gusta, que hay pocas perspectivas de celebración pero velas soplo como me llamo Nerea, por eso del mal fario y porque cumplir años es celebrar vida. A parte que me queda claro que el simple hecho que mi hija los cumpla cuatro días antes conlleva a que el poco protagonismo o entusiasmo que tuviera se quede ahogado entre guirnaldas y confeti infantil. Pero yo sé que a los 40 la fiesta será la mía no la suya jajaja.
Restos de salitre
Maletas, toallas, bañadores, gorros, trastos y más trastos. Kilómetros, música, paisajes que pasan a la velocidad del coche, mientras intentas retener matrículas y leer los nombres de los pueblos.