En esta vida lanzarse a la piscina es algo que a mí nunca se me ha dado nada bien, ni metafórica ni literalmente, yo más que entrar de cabeza me daba panzazos. El caso es que en esta vida no se tiene que quedar uno con las ganas de probar las cosas. En lo que al 2.0 se refiere suelo ir poco a poco, soy una indecisa de dos pares de narices y dudo hasta de mi sombra.
Cuatro años no es nada….
El 1 de mayo es una fecha muy especial para mí, es el día en que decidí abrir una ventana nueva en mi vida. Una ventana al mundo virtual que ha traído mucho de real y poco de virtual. Hoy hace cuatro años que tuve la loca idea de abrir un blog, nunca pensé que con el tiempo fuera el bálsamo de muchas de mis penas, la alegría de muchas noches, la sorpresa de otras tantas e incluso un hobby llevado a más.
Diversión bañeril
Desde que estuve en Sitges en la convención que organizó Toctoys me quedé prendada de algunas marcas de juguetes y hoy tengo por fin la suerte de poder hablaros de ellos en primera persona. En esta casa nos hemos puesto en modo acúatico para recibir por la puerta grande a Yookidoo y Plantoys. Los dos expertos de casa han hecho un testeo profundo que yo he intentado captar gráficamente lo mejor que he podido. Habiendo sufrido alguna melada que otra todo sea dicho.
Libros, rosas y amigas
Estaba en mi penúltimo de año de la Universidad cuando un 23 de abril sonó el timbre del piso de estudiantes. Era una flor, un libro y una carta llena de amor para mí. En ella el que hoy es mi pareja me quería trasmitir lo importante y especial que era esa fecha en Catalunya y lo que le gustaría poder compartirla conmigo. En cierta manera entendí que para ellos era como San Valentín, pero con regalo estipulado y maravilloso, rosas y libro.
De Madrid al cielo
Era bien pequeña cuando ya cruzaba en el Renault 5 del aitona toda la M30, mientras buscaba el “pirulí” . Siempre me pareció que aquella ciudad era monstruosamente gigante, normal por otra parte teniendo en cuenta que vivía en un pueblo de 300 habitantes, y que peinetaland era la ciudad más grande que había visto ante mis ojos. Con el paso de los años seguí pasando por el M30 en un Citroën BX y llegar a Madrid significaba haber recorrido la mitad el camino.
Ligera de equipaje
Este radio peineta no estaba programado pero ha sido verme poniendo audios a una amiga y verla muerta risa y decir vamos a aprovechar para hacer una incursión en las ondas. Aquí me tienen mascarilla puesta, cascos y mi pijama de guatiné pa verme….y tengo la laca de uñas a mi vera porque yo mañana salgo de casa y no vuelvo en dos días. Mi empeño en recuperar tiempos pasados o al menos la esencia de viajar ligera de equipaje.
Sueños Canadienses
Hoy vengo a hablaros otra vez de una marca que ha entrado con fuerza en los armarios de mis enanos desde que entró en esta casa hace un año. Hatley me tiene conquistada por su ropa de abrigo y lluvia pero mi debilidad extrema son los pijamas. Y hoy por fin puedo hablaros de ellos y contaros cual ha sido mi experiencia y de camino daros una alegría al cuerpo.
Nunca el tiempo es perdido….
No sé si me pesan los kilos o los años, bueno vale me pesan los dos y lo sé, el tema es como llevarlos o como ir digiriéndolos. No tengo sensación de tener una crisis por ver el paso del tiempo en mi cuerpo. Es más yo las crisis con mi cuerpo las tengo desde los 15 años, pa que nos vamos a engañar mari, principalmente por esa facilidad de ensanche que tiene, pero ese es otro tema. A mí me pesa el tiempo, como concepto de lo pasado, de lo vivido que nunca se volverá a vivir. Vale ya sé que toca vivir otras cosas pero algunas fueron muy chulas y no estaría mal repetirlas no??? Pero claro, en ese momento es cuando te das cuenta que ya no eres la misma, ni tu ni lo que te rodea […]
Con la cabeza a buen recaudo
Sabéis de sobra que soy muy fan de la tienda tutete.com y cuando surgió la posibilidad de hacer esta colaboración ni me lo pensé, por el producto y por la tienda. Pero he tardado lo mío en contároslos porque he hecho un testeo a conciencia, me ha faltado mandar al monillo a montar en globo con el casco de marras 😉
The Best Big Brother
Últimamente cada vez que estoy cámara en mano o pasando unos días en familia me pongo muy reflexiva, analizo, pienso y saco algo que tenía olvidado o que simplemente el estrés del momento no me estaba dejando ver. Qué importante es a veces pararse y mirar con distancia o detenimiento. Ya sabéis que no tengo hermanos y no los tendré (soy atea y no creo en los milagros). Tener a mi segunda hija ha supuesto poder disfrutar y observar ese fenómeno que en su día seguramente añoré. Y digo seguramente, porque prometo no recordar con claridad si fue algo que echará mucho de menos o me creara frustración alguna. Y en confianza no me imagino otro y otra como yo, soy muy intensa y he tenido que dar yo guerra por un tubo.