Yo no sé si la edad pasa factura o no pero la inactividad sí y de una manera radical, y me remito a las consecuencias. Hoy estoy aquí sentada sin pestañear, porque hasta las pestañas me duelen de las agujetas que me gasto señores. A servidora le ponen música y baila como si no hubiera un mañana eso sí, si te has pasado antes un semestre entero cual gallina clueca incubando una silla, pues tu cuerpo si cree que hay un mañana y duro donde los haya. El post de hoy es una realidad latente de como volver a mover tu cuerpo y hacer ejercicio a ciertas edades puede dar casi para una peli de humor made in Almodovar.