Dicen por ahí que según pasa este puente la navidad llega a las casa. Arboles, belenes y postales navideñas inundan mis Redes Sociales. Las calles se iluminan y los escaparates cobran vida. La gente se amontona, las compras se multiplican y la tele se vuelve ñoña y repetitiva.Pero me van a perdonar porque yo no me he activado y he intentado que en mi casa tampoco lo hagan. El mes de diciembre para mí es importante porque cumplen años dos de los hombres de mi vida y luego de segundo plato son las navidades.