Tutete me propuso probar un producto y acepte enseguida a pesar de tener poca fe en muchos de los artilugios que crean para solventar los problemas infantiles. El caso es que el tema miedos nocturnos del monillo me tenía preocupada y a pesar de saber que son etapas que suceden y que hay que pasar, mis noches ya son muy largas con su hermana como para añadir un plus. Así que me arriesgue y puse todas mis esperanzas en un platillo volador.