No hay nada como un reto tecnológico para sacar de quicio a tu lado tecnolerdo y terminar una tarde muerta de la risa y medio atacada. Hoy os vengo a contar la historia de una madre moderna que quiso hacer difícil algo que era bien fácil. La historia comenzó hace unas semana cuando Hue Animation Studio me contacto para una colaboración. Yo en aquel momento no pensé en mi lado tecnolerdo sino en el artístico y dije “claro que si guapi” yo quiero hacer un video con mi hijo de Stop Motion. Una tarde de tecnología y juego. Sonaba a momentazo genial, ojo que momentazo ha sido pero de risas, torpeza y diversión ante el embrollo y atasco maternal.